viernes, 23 de noviembre de 2012

KOOSHII - Colocación de un vinilo decorativo


Colocar un vinilo decorativo no tiene ninguna ciencia, es muy fácil. Simplemente hay que seguir unos pasos y consejos que serán los que garanticen una buena aplicación. Es muy sencillo. Comenzamos contándote algunos detalles que debes tener en cuenta antes de ponerte manos a la obra.

El vinilo decorativo consta de 3 partes:
- un papel "protector" que está situado en la parte trasera del vinilo,
- el vinilo, que es adhesivo y va sobre el papel protector.
- un papel adhesivo o "transportador", que va sobre el vinilo (lo cubre).

¿Cómo debe ser la pared o superficie donde va a ser aplicado el vinilo?
La superficie donde se va a colocar el vinilo debe ser lisa, la pintura debe estar sana (en buen estado), además de estar limpia y seca. Aquellas paredes que presenten rugosidades y no cumplan los requisitos anteriores, no son aptas para aplicar vinilos decorativos.

Preparación del vinilo
Antes de colocar el vinilo, y sin haber retirado ninguna de sus partes, es importante extenderlo sobre una superficie plana, y así extendido, frotarlo con un paño seco de manera firme y uniforme sobre todo el vinilo. De esta forma ganará en adherencia.

Elegir el lugar de su colocación antes de despegar ninguna de sus partes
Debemos estudiar muy bien dónde queremos colocar el vinilo decorativo antes de despegar ninguna de sus partes. Una vez tomada la decisión de dónde va a ser colocado, nos podemos ayudar con "cinta de papel" para sostenerlo en el sitio elegido. La cinta debería ponerse puntualmente en sus extremos, sobre todo en los extremos centrales. Con la cinta evitamos que se mueva el vinilo mientras lo vamos colocando. Si el vinilo es de gran dimensión también podemos cortarlo en algunas zonas dividiéndolo en trozos para que nos facilite la tarea.

Retirar el papel trasero que protege al vinilo
Lo primero que se quita es el papel trasero. Se va quitando de a poco, al mismo tiempo que vamos pegando el vinilo. El vinilo hay que pegarlo desde dentro hacia afuera para evitar que queden burbujas de aire en el interior. Es muy útil (sobre todo para quienes no tengan experiencia) utilizar una espátula de silicona que es especial para estos casos. No ralla la superficie y además hace presión sobre el vinilo para evitar que el aire quede encerrado entre la pared y el vinilo. Las personas más expertas quizás prefieran ayudarse con sus propias manos.

Una vez retirado totalmente el papel trasero, y sin retirar aún el papel delantero, aplanaremos el vinilo con un paño seco, desde el centro hacia los lados y de manera firme.

Retirar el transportador o papel adhesivo delantero
Ahora es el momento de retirar el papel delantero teniendo cuidado de no hacerlo muy de prisa. Irás viendo que el vinilo queda pegado a la pared mientras retiras el papel transportador. Simplemente hay que tener cuidado en aquellas zonas donde el vinilo sea más fino y quitarlo un poco más despacio ayudándote con la otra mano para proteger al vinilo mientras levantamos el papel. Y esto es todo.
Has colocado tu primer vinilo decorativo! Felicidades! Ahora ya podrás continuar agregando color a tu hogar, porque puede aplicarse en muebles, paredes, frigorífico... donde tú quieras.

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